Ayer asistí feliz a la presentación en sociedad de Plataforma editorial, el nuevo proyecto de Jordi Nadal. A Jordi le respeto y le aprecio. Posee una especie de "lápiz fosforito" con el que marca ideas, párrafos, conceptos... Terminas una conversación con él y tienes diez perspectivas más que al empezarla. Y eso es un don.
Me pareció insólita -y estratégica- la composición de la sociedad, en cuyo accionariado encontramos a un editor estadounidense, un editor de Cómics y a una empresa de gestión de derechos audiovisuales. Además, Plataforma cuenta ya con delegación en China. Y su portadista es un genio -lo dice alguien que ha sufrido el tema portadas en reiteradas ocasiones.
Desde el "campamento base" del que Jordi hablaba ayer les animo a subir y subir. Los lectores necesitamos editoriales como Plataforma. Y los autores, también.
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5 comentarios:
Off-topic: me ha llegado un boletín de infonomía con un curso tuyo sobre marca personal. Me ha hecho gracia.
Empiezo a ver mucha gente por internet que empieza a vender esto. Digamos que la mía está, simplemente, arruinada o, mejor dicho, perfectamente llena de ángulos afilados: o hiero o embalsamo.
Pero seguramente tu eres todo un ejemplo de marca personal bien llevada. Me lo parece más que otras cosas que veo por la red. (esto es un elogio, por supuesto)
Berlin,
a mí también me parece que tu marca está bien definida, aunque no sé si coincidimos en tu definición. Tengo una imagen muy positiva de ti y eso será por algo, ¿no crees?
Hola Neus!
A mí también me ha llegado el boletín de infonomía con tu taller y me he puesto igual de rojo que "berlin smith", aunque en mi caso, y después de haber lucido la camiseta de "unhombredepago" por las ramblas, sería como imposible recuperar algo de reputación.
Felicidades por tu marca y ¡Mucha suerte con el taller!
xavier
Muchas gracias. En realidad, Berlin la tiene bastante bien, pero como es un fantasma, cuenta poco. El otro, ese que vos conoceis por sentarse con él a tomarse una cocacola es el que la tiene bien arruinada. Uno es como es.
(oye, ¿y cuál es mi definición?)
Amigos,
esta conversación está tomando tintes esquizoides, habida cuenta de que os conozco a los dos en la presencialidad pero, leyendo lo que escribís, casi diría que... ¡no os reconozco!
Si queréis aclaraciones privadas, ya sabéis dónde encontrarme. Que tengáis feliz semana.
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