Ayer noche cené en Madrid con una veintena de libreras, convocadas por la editorial, con el objetivo de presentarles la novela.
Tamara, del Departamento de Comunicación de Urano, organizó el evento, con una sorpresa: al entrar, la librera era escoltada hasta la mesa por dos simpáticos jovenes que lucían una camiseta con la inscripción Un hombre de pago. Todas se prestaron y cruzaron el restaurante con auténtico poderío.
La cena fue una ocasión formidable para aprender cómo funciona la compra de libros: ¿por qué los lectores escogemos un ejemplar y no otro? ¿Qué tipología de lectores lee qué? Fue muy interesante escuchar como la recomendación del librero es a menudo casos clave en la decisión de adquirir una novela. Las libreras atendieron todas mis preguntas de forma prolija. Se lo agradezco, aunque confieso que cuanto más me explican el sector, menos lo entiendo.
"Tremenda conversación", que diría el Piesplanos, para una noche de lluvia.
noviembre 08, 2006
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4 comentarios:
Neus, sinceramente estoy algo intrigado... deberías "entre líneas" o con tu estilo directo participarnos de los comentarios y respuestas de las libreras. Puede ser muy ilustrativo y esclarecedor o todo lo contrario...
Felicidades anyway.
PS: Tu también llevabas la camiseta? ;)
JB,
tienes razón: el tema merece una entrada monográfica.
Camiseta: ¡no! A mi me llevaban los de la camiseta :-)
me sumo a jb
Berlin, ¿te sumas a su petición de post o a su pregunta de si yo llevaba la camiseta ? :-)
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