De mi ya (demasiado) lejano viaje a Cuba guardo algunos recuerdos de santos. De santa, mejor, porque fui informada por una amable señora en Santiago, entendida en Orishas, de que la que me protegía concretamente era Yemanyá.
Ella es "la señora de los mares, por lo que su color es el azul marino. Es brava y generosa, pero también iracunda. Es una de las más adoradas por los habaneros y su imagen escondida en El Malecón está siempre llena de frutas, botellas de ron y tabaco". La santera santiaguera consideró concluyente mi procedencia barcelonesa, dado que Yemanyá es, en el santuario católico, la Vírgen de las Mercedes, quien a su vez es la patrona de mi ciudad.
Viendo como transcurren estos días estoy pensando seriamente en encomendarme a los santos, a Yemanyá y a todo orisha del que pueda acordarme, aunque tengo mis dudas: ¿es posible conseguir asistencia extraterrenal inmediata cuando la devoción es sólo puntual?
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
La asistencia extraterrenal se consigue siempre. De forma cotidiana y en ocasiones de manera muy especial por coincidente -las menos-. En la mayoría de las ocasiones, sin tener que "pedirlo". El tema es que no somos conscientes de ello por la búsqueda de lo material e instanáneo. Los parabienes acuden cuando convienen, no cuando creemos más necesitarlos. La fe y el deseo intenso ayudan. Con el tiempo observamos que ocurrió justo lo que más nos convenía. Nunca en el momento, en nuestro "momento", ya que hubiera sido menos positivo o contraproducente. Es un proceso algo cuántico. Despertarnos y sentirnos vivos cada mañana: ¿No es ya una gran asistencia extraterrenal?
Publicar un comentario